¡Construye una tienda!

¡Construye una tienda para ti y tu familia!

Y acostumbraba Moisés tomar la tienda, y la levantaba fuera del campamento a buena distancia de él, y la llamó la tienda de reunión. Y sucedía que todo el que buscaba al SEÑOR salía a la tienda de reunión, que estaba fuera del campamento.
(Éxodo 33:7 NVI).

Moisés hizo algo que nosotros deberíamos hacer también:
“...tomó el tabernáculo y lo erigió lejos, fuera del campamento, y lo llamó ‘tabernáculo de reunión’... Y cualquiera que buscaba al Señor, salía al tabernáculo de reunión...”

(Éxodo 33: 7 RV-1960).

¿Y qué iba a suceder en esa tienda de campaña? “El Señor hablaba con Moisés cara a cara, como habla cualquiera con su compañero...” (Vr. 11).

¡Un tiempo con Dios “...cara a cara...”! ¡Eso es lo que todos los Icthus del mundo necesitamos!, ¿verdad?

Así que, apaga el teléfono móvil, desconecta la televisión y ¡construye en algún rinconcito de tu hogar, “una tienda de campaña” para ti y tu familia... porque el Señor tiene las respuestas que nos precisan!

¿Y de qué hablaban en aquella tienda? Moisés oraba:
(a) “...no me has indicado a quién enviarás conmigo” (versículo 12b)... Algunos de los problemas que tienes vienen de las personas que ejercen influencia sobre ti.
(b) “...Te ruego que me muestres... tu camino” (versículo 13b)... Dices que por lo visto la forma de hacer las cosas no te está funcionando muy bien. Por lo tanto, ¡adquiere el aporte divino!.

(c) “...para que te conozca...” (Vr. 13b). El verbo ‘conocer’ no significa un encuentro casual sino que expresa intimidad entre dos personas. ¿Herman@ Icthus, conoces bien a nuestro Señor?

(d) “...y halle gracia a tus ojos...” (Vr. 13b). ¡Sí! la gracia de Dios... y tienes que recibirla; ella abre puertas, te da ventajas e influye en la gente, incluso antes de que empieces a hablar.
¿Y qué le contestó Dios a Moisés en aquella tienda? “...haré esto que has dicho, por cuanto has hallado gracia a mis ojos y te he conocido por tu nombre...” (Vr. 17).
¿No te gustaría tener una relación en estrecha intimidad con Dios?
Pues, hoy ya lo sabes... ¡Construye una tienda para ti y tu familia!

¡Dios, mi prójimo y yo!